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martes, 23 de agosto de 2011

El mismo fuckin tema.

Entiéndanlo, perder un hijo no es un perder un juguete, no son juguetes ni objetos, ni los seres humanos ni los animales lo somos, merecen respeto y que les guardemos un duelo durante cierto tiempo. No son cosibles, ni nosotros ni los animales.


Por eso dejé de participar en tantos foros de pérdidas porque, últimamente la vida está a la deriva, no entienden que perder un bebé no es algo fácil y se requieren cuidados, se requiere tiempo, esfuerzo y aceptación; No podemos pretender embarazarnos al día siguiente por más que nos duela la pérdida... Entendamos que no son sustituibles, que no por embarazarnos pronto quiere decir que está bien, todos tenemos nuestros tiempos y también nuestro cuerpo, no podemos andar por la vida obsesionadas... Hay que darnos nuestro tiempo de conocernos y de reconocernos, de saber quienes éramos y aceptar que no volveremos a ser las mismas, que todo lo que nosotros conocíamos, ya ha dejado de existir y que debemos labrar un camino nuevo, lleno de aprendizajes y de sabidurías que nos tuvo que dejar nuestro bebé.

No comprendo a esas mujeres que pierden a su bebé y al mes o dos andan desesperadas por volver a ser madres sin tener consideración con sus cuerpos, con sus utéros, sin darse cuenta del daño que se están haciendo y a su cuerpo también.

Los hijos no son muñecos que si se rompen se pueden volver a comprar, ni son objetos ni trofeos, son seres humanos, que tienen o tendrán una personalidad propia, que no pueden ser iguales a otros porque todos somos únicos e irrepetibles, esa es la magia de la vida; Los hijos no son caprichos ni sensaciones que un día tengo y al otro no, son responsabilidades y compromisos.

Yo comprendo lo que se siente el quedarse en medio de la nada con todo listo, con la ilusión al máximo, pero nosotros nada podemos hacer al respecto, más que saber donde pisamos, entre toda esa hojarasca reconocer que debemos comenzar de cero, ser mejores personas y no dar por sentada la vida.

Un hijo no es un refugio para liberarse de la amargura, ni de los complejos, ni mucho menos es una tabla de salvación para ''amarrar'' a un hombre o continuar con un matrimonio mediocre que nada tienen que estar haciendo juntos, es una razón para seguir, para comprender el misterio de la vida, para entender que pasamos la mayor parte del tiempo pensando estupideces mientras dentro de nosotros ocurre algo maravilloso ¿Le hemos dado alguna vez a nuestro cuerpo las gracias por todo? En mi entrada anterior, dije que mi hija menor había sido el último regalo de mi cuerpo, así es y le doy gracias todos los días... Y le di gracias cuando el dolor pasaba, por haberme dejado ser mamá tan poco tiempo.

Siempre que leo a mujeres histéricas y desesperadas por estar de nuevo encintas, siento un desazón porque, no se permiten sufrir, ni recuperarse, ni entender que pasó. Por eso dejé de entrar en esos foros, donde todo se basa en la ciencia, en la práctica, en la cuñada que a las 3 semanas de perder su embarazo ya estaba teniendo relaciones con su esposo para volver a embarazarse, en que el médico me dio ésto o lo otro... Y no piensan en el ser interno, en el atavismo de la mujer y de la hembra que se va a su cubil a lamerse la herida... Y a recuperarse.

Y éste es el único espacio donde puedo decir que pienso realmente y donde puedo plasmarlo... Y también en donde puedo desahogarme.

Esto es con mucho respeto, es sólo mi punto de vista y mi sentir...






jueves, 18 de agosto de 2011

Mi último embarazo.

Recuerdo de mi último embarazo...


He tenido la suerte y la desgracia de estar en ambos lados, de ver hijos vivos y de sufrir por hijos que murieron, mi vientre ha sido nido y ha sido tumba, ha sido fértil y fuerte e infértil y débil, he tenido la dicha de tener dos hijas maravillosas como traviesas, mágicas, con una perfección que será irrepetible, he tenido la desdicha de perder tres hermosos bebés, igual de perfectos, lo malo es que nunca sabré como es que hubieran sido, eso sigue doliendo, pero el camino del amor y del dolor, nos lleva a recorrer senderos y a aprender muchas cosas.

Mi último embarazo, fue hace tres años, hace tres años éste embarazó culminó con el nacimiento de mi hija menor, Leona, ella nació sana, fuerte, viva y con el cabello más negro que cualquier noche de verano. Ella se hizo de suspiros, de ver juguetes tirados y pensar que Sora no tenía con quien compartirlos, se hizo de invierno y de primavera, se hizo de magia y de fuego, se labró en cristal, en ojos de los cielos más azules y más enormes de éste mundo, así nació Leona, con sus ojos abriéndose al mundo, con sus manitas que parecian, no sé, como de terciopelo, era como una muñequita que salió de ese cuento que, jamás contaron.

Ahora es toda una niña que el lunes irá a la escuela, se me acabó la bebé de la casa, se me acabó el tiempo de los pañales, de las teteras, del chupón, de que no sabía caminar, ni comer, ni sentarse, ni decir nada, ya no tengo bebés en casa, ella fue el último regalo de mi cuerpo.

Después de ella, éste útero que antes fue dador de vida, de salud, que albergó durante nueve meses a dos criaturas, fue capaz de ser un cementerio, fue capaz de volverse frío, inhóspto, cruel, éste útero ya no soportó ser el refugio acogedor, tibio, que era en el pasado, ya no quiso, así que después de llegar a muchas conclusiones, decidí que prefiero quedarme con el recuerdo feliz del embarazo de Leona y Sora, decidí desde hace años, que ya no tendría más hijos biológicos y así será. El día de ayer acudí con mi médico y solicité los exámenes preoperatorios, si todo sale bien en octubre me ligarán las trompas y no volveré a ser madre nunca.

Leona fue y será siempre el mayor tesoro que me obsequió mi vientre, en ese entonces mi vientre era una cuna llena de amor y yo podía acariciar mi panza cada que quisiera, porque sabía y confiaba en que, el ser que estaba ahí estaba a salvo, que era el único sitio seguro en el mundo, Leona se movía con fuerza y rapidez y yo era feliz, me quedo con la gran fortuna de saber que se siente parir un hijo, me quedo con el orgullo de caminar como pinguino .... Te amo Leona... Gracias por ser el tesoro más grande que mi cuerpo me dio....!

lunes, 4 de julio de 2011

Cuando es otra madre la que demerita tu dolor.

Cuando una mujer pierde un hijo, es como si el mundo se pusiera en su contra, como si ella fuera la culpable, la causante, todo parece ir por otro rumbo, a veces los médicos y las enfermeras se portan de un modo tan cruel y abusivo que, lo que uno se pregunta es...''¿Qué hice mal?''.

Podemos ''pasar'' de que, gente que no ha vivido un dolor como éste nos diga cosas trilladas que poco a poco se vuelven un cliché en nuestras vidas, pero dentro de nuestro inmenso dolor, todavía conservamos comprensión para con ellos pues, sabemos que en el fondo no saben que hacer para ayudarnos en éste camino. ¿Pero qué hacer cuándo es otra mujer la que nos hace sentir mal? ¿Cuándo esa mujer también es madre y perdió un hijo? ¿Qué nos diferencia la una de la otra? ¿Qué ella si pudo tener a su hijo en su panza más tiempo? ¿Si lo pudo cargar? ¿Si lo sintió moverse?. Hablaré de cuando perdí a mis gemelos hace dos años ( junio 15 2009) Participé en un foro donde desde que me embaracé de mis hijas estuve, ahora estaba compartiendo en otro lado, en el apartado de ''Pérdidas'' y ahí habían mujeres que habían perdido embarazos, de todos los tipos, unas muy buen plan y otras no tanto y otras muy metidas en sus cosas tal vez como yo y como todas en cierto momento; aunque han pasado ya dos años, todavía recuerdo eso que leí: '' Pero tú ni siquiera les oíste el corazón, a mí me creció la panza, tenía sus cosas, no es lo mismo'' Yo la verdad al recordar ésto siento una profunda lástima para con el ser que me hizo sentir en ese momento como si mi dolor fuera menos por tener sólo cinco semanas de gestación, como si ella con sus treinta y seis semanas, tuviera la capacidad y la potestad para hacerme sentir que mi dolor, mis bebés y mis sentimientos en ese entonces, no valían nada.

No concibo como es que hay mujeres tan poco solidarias para con otra que atraviesa lo mismo que ella pero en otra etapa, puedo comprender que quien afortunadamente nunca ha perdido un hijo no lo entienda, nos juzgue y nos diga amargadas, puedo entenderlo aunque no lo comparto, pero no puedo entender como una mujer que también llevó vida dentro de si, pueda tener esos sentimientos tan crueles y tan vacíos para con otra que está sufriendo, entonces llego a la conclusión de que, las mujeres en vez de ayudarnos a sobrellevar nuestras cosas, nos aventamos al hoyo las unas a las otras, no sólo en éste tema si no en varios, no tenemos una unidad, ni una fuerza.... Porque juzgamos siempre al de a lado, pero lo que más duele es no saberse entendida por otra mamá que también perdió a su bebé.

A partir de ese momento, me alejé de los foros poco a poco, pero no porque me diera cuenta que ella tenía razón, si no porque, yo debía vivir mi proceso sola, tomar desiciones, reflexionar, valorar a mis hijas vivas, llorarles con todo a mis hijos muertos que son tres... Llenarme de días buenos y malos, saber que las cosas eran así y yo debía sacarles provecho, sabiduría, sabía que el día en que, me topara con otra mamá como yo, no le iba a decir palabras cargadas de ácido, sabía que cada una enfrenta éstas cosas como puede y como entiende, algunas de un modo sano, otras del modo negativo... No sé, pero, yo me di cuenta que tampoco quería tener más hijos, que con las dos niñas que tengo era suficiente, tomé esa desición entre muchas otras.

Yo saqué de esa experiencia tan amarga y tan agresiva, que no todos los seres humanos estamos en la misma sintonía, que somos ''especistas'' de algún modo, que también somos '' calculadores'' y que muchas veces en base a la especie y al tiempo, hacemos juicios de valor, emitimos opiniones que no traen muchas veces nada de razón o son apáticas o hirientes, determinamos si vale la pena o no sufrir, por el tiempo que permanecimos con alguien o por el tiempo que alguien permaneció con nosotros... No nos damos el derecho universal de sentir la pérdida en cualquiera de sus etapas.

Saqué de conclusión que no debo caer en eso, que debo ser yo misma ( así de sincerota como soy) Para poder vivir en paz, de decir que perdí dos embarazos, que mi utéro tiene problemas, que no seré mamá biológica otra vez porque, prefiero darle la oportunidad junto con mi esposo, a un niño que por alguna razón se encuentra sin papás esperando una familia... Consideré muchas opciones, volví a reflexionar y por eso, mis hijos ( que no están físicamente) SON LO MEJOR QUE PUDO HABERME PASADO, saber que fui su mamá, que estuve embarazada de ellos, que fueron parte de mi ser ese breve tiempo, fue un suceso mágico y lleno de sabiduría.

Leonardo y bebitos, poco a poco, les estoy cumpliendo la promesa que les hice.

=)

lunes, 27 de junio de 2011

El día que me hice vegetariana.

Bueno... Pues vegana vegana no soy, todavía consumo productos lácteos, leche, huevo, queso, etc... Pero ya no como ''cadáver'' Ni lo comeré de momento, pero bueno el día que decidí hacerme vegetariana fue un viernes y todavía era tiempo de frío, lo último que comí fueron huevos con chorizo y... Cuando me acosté a reposar la comida, le hablé a mi esposo y muy seriamente le dije: '' Ya no voy a comer animales'' Él sonrió y me apoyó porque así es él y nunca he tenido esos típicos problemas de machismos ni nada, afortunadamente no me casé con un macho men, me casé con un hombre y el mejor de todos. Bueno, ese no es el punto si no que, desde que me hice vegetariana los comentarios positivos y también por qué no los fuera de lugar no se hicieron esperar.

¿De qué están hechos tus tenis?.

Afortunadamente de lona y de suela de plástico, no he necesitado usar piel de animales como vestimenta porque nunca me ha llamado la atención, además con lo que cuestan los zapatos o las chamarras de piel puedo comprar una despensa mínimo para un mes y sin problemas. Pagar deudas no sé, no costearía un artículo de piel hecho con sufrimiento animal para satisfacer mi vanidad que dicho sea de paso, nunca me importado pues hay miles de cosas lindas que nada tienen que ver con los animales e interrumpirles la vida para los ''lujos'' de otros.


¿Y comes pura lechuga?.

Esa pregunta creo que es la clásica porque, no se ponen a pensar que hay muchísimas cosas que se pueden comer sin necesidad de matar a un ser vivo y llenar mi cuerpo con otro cuerpo... Por ejemplo el tofú, la soya, la leche de soya, verduras que tienen más proteínas que la leche misma y más calcio... Y que si lo sabemos equilibrar se hace una dieta rica en nutrientes y manjares deliciosos que cualquiera puede preparar, la salud viene por añadidura.


Pero si eres re flaquita ¿Por qué no comes carne? Si la carne no es mala...

Nadie dice que sea mala por si misma, es ''mala'' porque, del modo que es obtenida al animal no se le ofrece ningún tipo de respeto ni mucho menos se le da una muerte humanitaria como muchas personas creen o piensan, a los cerdos los tienen en unos cubículos exageradamente pequeños, ahí las hembras tienen que parir en un espacio reducido para que sus crías no se llenen de estiércol porque a los criadores les importa muy poco como es que están esos animales, además de que, al darles de mamar las hembras quedan aprisionadas entre celda y celda, aún así ellas hacen el esfuerzo de ''mantener'' su espacio pequeño lo más limpio que se pueda, si no lo sabían los cerdos están en el cuarto lugar de inteligencia abajo del humano y del delfin, chimpancé etc... Tampoco muchos saben que por cada cabeza de vaca sólo hay un vaquero al que poco le importa como es que están esas vacas, como es que es la tierra y lo que comen y mucho menos en colgarlos de las patas y darles muerte... Sé que suena exagerado pero, las cosas no son muy diferentes en las granjas o establos, además hoy en día los rellenan de esteroides y quien sabe que sustancias más para que los pollos se vean más ''pachoncitos'' Es fácil sólo hay que comparar una pechuga de pollo actual con una de los años 50's...




''Los estigmas del vegetarianismo son...''

Sólo comemos lechuga y entre más húmeda y ''supiente'' a agua esté es mucho mejor, aparte de las verduras ya conocidas ( zanahoría, apío, tomates etc) Y condenamos claro está a quienes coman carne y usen pieles de animales como prendas de vestir... Porque no solemos tolerar esas actitudes, cuando es al revés pues quienes se ponen defensivos son los onmívoros tratándonos como hippies o descocados... Nadie les dice que no coman carne, es problema suyo, tienen una especie de tabla de repeticiones, no se trata de buenos o malos, sólo que algunos elegimos no comer animales muertos.

'Juzgamos a quienes dejaron el vegetarianismo y volvieron a la carne''...

Claro que no, nada más errado, cada uno tiene sus motivos, yo misma no sé si un día lo deje y vuelva a ser omnívora aunque, de ser así ya no sería lo mismo y quizás trataría de comer la menos carne que se pudiera porque, ahora sé como es que funcionan las cosas y, sobretodo que tengo el poder de decidir que hacer y que me queda con mi estilo de vida, mientras no le haga daño a terceros incluídos lógicamente animales, la vida es una ruleta, no sabemos que nos va a deparar pero de momento tengo muy claras mis ideas, las mías, los demás pueden hacer lo que mejor les plazca es su cuerpo y su cabeza...

'' Los vegetarianos están desnutridos o anémicos por la falta de proteína y grasa animal''...

También es erróneo, puede uno saber equilibrar sus alimentos, informándose primero, leyendo, conociendo cosas y si se desea hasta se puede ir con un nutriólogo para explicarle nuestras dudas, hay complementos como el B12 en el caso de los veganos estrictos o incluso de los macrobiòticos, etc... Hay muchas cosas que saber al respecto de eso, pero entre más café o verde sea un plato, está más desbalanceado, es bueno que tenga colores, sabores, que esté equilibrado, hay omnívoros que están enfermos porque se retacan de chatarra, hay vegetarianos que también lo están porque no saben comer, eso no tiene que ver gran cosa, el secreto es saber comer.

Por último considero que, con una mordida puedes cambiar tu vida, el mundo, tu entorno, hay que leer lo que dicen las etiquetas de lo que bebemos o comemos, hay que ver que tanto porcentaje de cosas buenas tiene y cuánto porcentaje no, hay que saber acerca de las situaciones de los animales en las granjas y en los ranchos, hay que saber de que se alimentan para saber con que nos estamos alimentando y que es lo que realmente le estamos metiendo a nuestro organismo. Inculquemos en nuestros niños ( hijos, sobrinos, nietos, ahijados, amiguitos, alumnos) Una sana alimentación INDEPENDIENTEMENTE DE SI SÈ ES VEGETARIANO O NO, hay alimentaciones balanceadas, nutritivas, que realmente le aportan algo a nuestro cuerpo y refuerzan el crecimiento de los niños en todos sus aspectos, mental, fìsico y hasta emocional.

Pero sobretodo, inculquemos el respeto, la tolerancia y aprendamos cosas nuevas, para que nuestro pensamiento y cerebro también tengan una alimentación adecuada =P.

* Esto no es una guía ni nada, realmente no hay muchos datos, es más bien como nos ven a los vegetarianos... En algunos casos.















martes, 14 de junio de 2011

Y la vida siguió después.

Mi tío murió un miércoles 15 de diciembre del año 2010... Eran como las 11.50 o 11.55 del día, yo estaba trapeando el piso cuando mi papá me llamó o yo le llamé primero no recuerdo, pero lo que si recuerdo fue que me dijo que mi tío ya estaba muriendo y que salía para verlo pero al llegar al hospital, no lo alcanzó con vida.

Mañana cumple seis meses de que falleció y la vida después siguió claro está, a partir de ese momento las cosas fueron diferentes, me acerqué más a mis familiares a los que hacía muchos años no veía; volví a ver a mi abuela, hablar con ella, con mis primos, reír y pasar momentos felices. La vida ha seguido y llevo a mi hija al kinder, me imagino a mi tío mirándonos cada mañana cuando nos dirigimos con mi papá a la escuela, cuando platico con alguien, cuando comemos, supongo que siente entre alivio y tristeza al saber que su familia seguimos haciendo las cosas de siempre aunque él ya no esté, que seguimos riéndonos, escuchando música, viendo televisión, disfrutando la lluvia o el café o un cumpleaños, una fiesta escolar, que a él le gustaría como a mi papá estar aquí y verlo, vivirlo, emocionarse y sonreír... ¡Claro que si! Pero también sabemos que eso hoy por hoy es imposible físicamente pues... Él está en otro lado.

La vida siguió con comidas familiares, con días fríos, con nevadas, con sueños y proyectos personales, sé que mi tío me daría buenos consejos ahora a éstas alturas de mi vida, tenía los mejores abrazos, los mejores consejos y también un mal genio, pero era un buen tipo, creyó en mí y me tuvo fé, fue la única persona que hizo eso en mi vida antes de conocer a mi esposo.

Las tardes siguen igual, las noches y los fines de semana, las fechas festivas, pasa el tiempo y ya van seis meses... y la vida ha seguido después en la búsqueda de esas cosas que nos hacen falta y que las tenemos dentro.

lunes, 6 de junio de 2011

Nuevo nombre.

Je! Pues después de casi tres años con el nombre de ''Mi rincón'' Le damos un poco de giro a éste espacio que sé hace mucho no suelo cubrir como antes ¿Cierto? Pero es que hemos tenido un añito ajetradillo y pues prometo ponerme al día -Aunque a nadie le interese tal cosa- En fin, escribo para mí.

Pues ya han pasado algunos meses desde que murieron mi tío y mi abuela respectivamente, todavía me es un poco difícil de creer que ya no estén con nosotros independientemente de como era nuestra relación en los últimos diez años, la gente madura y crece y pues eso me está sucediendo inevitablemente, desde que abrí el blog a la fecha no habían cambiado muchas cosas dentro de mí excepto que atravesaba una etapa difícil emocionalmente y fue una etapa llena de aprendizajes y cambios, lo agradezco profundamente pues gracias esos momentos puedo ser la persona que soy hoy. Ahora me encuentro atravesando otra etapa difícil en cuanto a mi salud, todavía no sé que tengo a ciencia cierta pero lo que sea que tenga lo vamos a enfrentar y saldremos adelante de todo; no puedo rendirme ni dejar que los que me rodean se rindan, hay que dar los primeros pasos y ser fuertes, ser felices y a vivir la vida.

Volveré a escribir más seguido acá...I promisse.

martes, 15 de marzo de 2011

Las memorias.

Era un martes muy transparente y yo le pedía a mi esposo que me arreglara una pulsera extravagante que había comprado en un bazar a sólo cinco pesos, yo estaba tomando café en una taza que compramos en el halloween del 2009 y que no tiene aza por que, se ha caído tantas veces pero no se decide a desaparecer. Yo estaba pensando en esos días, en cosas triviales, en que mi tío estaba recién muerto, en que me quería mucho y lo único que yo tenía eran unos mensajes de él en mi celular que me envió un mes antes de morir, y en eso mi celular negro y pequeño vibró en la mesa de madera que mi madre me dejó en el patio de la casa donde ya no vivo más, y entonces yo miré fijo a mi esposo componiendo esa pulsera, cuando mi papá me dijo que mi abuela había muerto la noche anterior, que si quería ir a la funeraria, pensé millones de cosas en fracciones de segundos ¿Cómo es que nos estaba pasando eso? ¿Cómo en tan pocos días se habían muerto dos personas? Mi tío falleció el quince de diciembre, mi abuela no soportó la muerte de su hijo y se tiró a la depresión y ya tenía ochenta y tres años, se durmió y no volvimos a verla.

Cuando me acerqué al ataúd, la ví ahí quieta, inerte, llena de tranquilidad, venían a mí flasback's de los lejanos días idos, de esas epócas en su casa, de mi vida a su lado y ahora, estaba ahí en medio de una sala fúnebre, con una ropa negra y elegante, mi padre estaba triste y desecho pues perdió a su hermano menor y a su madre en diez y ocho días, cuánta melancolía se respiraba ese martes de enero, hasta yo que no fuí muy afortunada con ella, sentía ese dejo de nostalgia pues, mi abuela estaba muerta.

Ahora, después de tantos años, he comprendido muchas cosas, como no fui capaz de decirle un día que lamentaba mucho su crianza, su niñez, debí regalarle la muñeca que nunca tuvo, debí ver las cosas positivas también y agradecerlas.

Ahora, ellos ya no están y no pueden remediar nada, la única y los únicos que podemos cambiar la historia y nuestras vidas, somos nosotros, no cometiendo esos errores de antes, viviendo pensando en nosotros y en ellos, ellos ya saben mucho... Ahora nos toca aprender a nosotros.

sábado, 12 de marzo de 2011

Si quieres hacerlo, hazlo.

Después de mucho tiempo de no escribir por acá, vuelvo a retomar ésto... Mi abuela murió el día tres de enero de este año, pero ese es tema de otro post.

A lo que quiero ir es a que, muchas veces leí en los foros de los que por suerte me ausenté ( o me banearon por mi encantadora personalidad) A mujeres deseosas de ser madres, con posibilidades de serlo, jóvenes, con familia hecha, con todo a su favor -por que si lo tienen todo a su favor- Pero algo las detiene ¿Que es? El miedo, eso que nos bloquea y nos saca canas de colores, malos ratos y continuas apariciones de eventos pasados que, nosotros tomamos a cuenta como parte del presente. Y dicen: ''Ya iré luego al médico para platicar y ver que me dice'' ó '' Si quiero ir pero me da miedo.'' Y saben que de todos modos se verán ahí en el médico por que en el fondo de sus corazones es lo más desean en el mundo, pero más puede el temor que las ganas y entonces se pasan los años y los años y los años y ese ''todo'' a su favor se vuelve un desperdicio de tiempo, yo he perdido tres bebés como algunas personas ya saben y claro que también sentí temor por próximos embarazos, pero mi deseo de formar una familia con el hombre que yo amo pudo más que todo ese nerviosismo enfrascado que no me llevaba a ninguna parte.

No sé si influye que, en mi segundo embarazo yo tenía veinte años y que en realidad era un embarazo sorpresa, o si influya que me sentía segura al lado de mi esposo con quien he compartido casi 7 años de mi vida, pero estaba emocionada, por que sentía que ésta vez las cosas SI iban a salir bien y que mi hijo iba a cuidar de su hermano o hermana acá en mi panza, así fue y hace casi cinco años nació mi hija Sora, quien nos ha dado mucha alegría y muchos días felices, pasé los mejores meses de mi vida cuidándola junto a mi esposo, viendo como crecía, sus logros pequeños pero grandes para nosotros, luego al tiempo llegó mi hija Leona, que terminó por completar nuestra familia robándonos sonrisas y momentos llenos de esa magia que poseen los niños. Aunque el panorama tiempo después se volvió a poner triste cuando perdí a mis gemelitos en el verno del año 2009, después de esa pérdida tan grande y tan dura, he decidido -por mí- No volver a tener hijos biológicos, por que mi cuerpo ya no está capacitado para ello, ni tampoco deseo volver a ser madre biológica, mi esposo aún no está muy de acuerdo con ello pero sé que con el tiempo él comprenderá.

Mis planes a futuro en el camino de la maternidad, son de poder adoptar un niño y un niño ya grande de entre 6 y 8 años, todo ser vivo merece tener la oportunidad de vivir en una familia, con dos padres que sean o no consanguíneos amen como a nada en el mundo a esa criatura que merece llevar una vida digna, no es que tenga miedo de quedar embarazada, es que ya no lo deseo y aparte estoy segura que mis niños en las tierras del verano, estarán felices de que les demos a otros niñitos aquí en la tierra de tener una familia, creo que con eso podré cumplirles esas promesas que todavía y por toda la vida les seguiré cumpliendo.

No hay que detenerse ante las dificultades, ni hay que sugestionarse con el cuerpo de uno, más bien hay que saber que la palabra MAMÁ no simplemente es parir un hijo, si no, parirlo del corazón, llevar ese proceso que a veces es tedioso por que se desea y por que se valora la vida, ser mamá de vientre es fantástico, es genial, es lo mejor que la naturaleza le haya podido dar a uno como mujer, pero ser PADRES del corazón debe ser lo máximo... Y ver en los ojos de una criatura llena de esperanza la hermosura de un amor realizado.

Si quieren ser mamás, háganlo, si tienen miedo de pasar otra desgracia no se detengan, no caigan en el juego del miedo, no lo oigan y no le hagan caso, detrás del miedo no hay nada, el miedo es un gato asustado que si lo abrazan puede ser su amigo o puede irse y dejarlas de molestar, sean madres y padres, vayan con quien tengan que ir, realicen sus sueños... Denle oportunidades a la vida, vivan de modo armónico y en confianza... Si quieren hacerlo, háganlo... Por que no se arrepentirán y caminarán el mejor trayecto que hubieran caminado antes.