El abrazo.

Hace un mes aproximadamente la directora del plantel escolar nos quitó la cocina donde laborabamos por que, no le gustó como estábamos vestidos, se inventó pretextos absurdos y quejas que nunca existieron para poder darle la cocina a la suegra de otra maestra. Claro que me enojé y sentí coraje e impotencia por esa injusticia, durante la primer semana era difícil para mí acudir a la escuela y ver el sitio que yo tuve ocupado por otra persona y que esa persona lo ocupase a base de engaños y arbitrariedades, pero conforme fue pasando el tiempo fui aceptando que eso estaba cerrado y que pasara lo que pasara no me iban a devolver el trabajo.

Me portaba cortante con la maestra de mi hija por que ella tuvo mucho que ver en esa decisión y desde que le dije lo que yo pensaba de eso, ella me habló lambiscona y lo sigue haciendo hasta la fecha, lo cual yo siento. Ayer venía caminando y me topé a la mamá de un niño al que le dábamos desayuno que es miembro de la mesa directiva y empezamos a conversar y salió el tema de que ella no compra desayuno desde que no estábamos, que nunca oyó ninguna queja y que veía como los niños iban contentos a comer a la cocina, hasta que me dijo las palabras que no me esperé oír en mucho tiempo, la directora se iba de la escuela por que no pudo con la presión, por motivos de salud, bla bla bla bla, etc, etc, etc...Hoy en la mañana se despidió de nosotros y no hubiera sido nada emocionante si no fuera por que al estar escuchando lo que decía la inspectora, se echó a llorar y se le escurrían lagrimones y ella se volteaba para que no la vieran...Y yo, siempre dije que cuando eso pasara iba a estar saboreando venganza...Una vez más mis palabras se hicieron añicos y no pensaba acercarme ¿Saben? Le extendí la mano le dije: ''Suerte maestra y...Recuperese pronto'' Ella me abrazó y me dijo...''Ya sé señora, muchas gracias''...Cuando ella me quitó mi trabajo, nuestro trabajo, yo también lloré mucho y me puse triste, me enojé como dije antes...Ahora ella también estaba llorando por que, tiene que dejar de hacer algo que le gusta y nos empata el hecho de las lágrimas, de las sensaciones de espasmos y de saber que en el fondo, fue víctima de sus propios consensos que la llevaron ahí. Nos empata el hecho de haber perdido algo que nos hacía sentir útiles...Por eso, por eso me acerqué, por que ahora ella sabe como me sentí yo y nos hace iguales, me acerqué por que en esos momentos uno no necesita soluciones si no un simple y llano abrazo...De alguien que sabe lo que se siente quedarse sin eso que nos hace productivos.