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martes, 6 de enero de 2009

Una visita al dentista.

Hacía más de tres años no iba con uno, aún recuerdo aquella vez cuando tenía escasos 15 años y una Dra mal encarada me dijo de la nada '' te vas a quedar sin dientes muy joven''...Y heme aquí con mis 23 putrefactos y depresivos años, un padre amargado y dos niñas que a su modo me alegran la vida siempre, un consultorio de colores relajantes y cenefas en flores, una secretaria gordita, y un médico que es médico, no torturador mental ni un hitler en la medicina; ni siquiera me cuestionó el por que no traía dientes limpios, el mismo al contrario, me dijo que no me cepillaba bien por que, estaba muy lastimada, que no tenía pérdida de hueso, ni movilidad, y que nadie podía precisar cuando es que se iba a caer un diente.

Mis miedos se hicieron un kleneex y lo tiré a la basura o lo dejé olvidado en el taxi.

Quizás aquella Dra me dijo eso sólo para asustarme, pero no midió las consecuencias y tuvieron que pasar casi 10 años para que esa idea se quedara fuera de mis pensamientos.

Hasta que encontre a un dr que es gente, que es humano, y no un juez ni una tortura mental.

PD: Por cierto, el médico escuchaba música electrónica.

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