Como en los viejos tiempos.

Haciendo remembranzas extrañas en un sábado igual de extraño, donde me quejo de la programación en el cable, donde lo mero bueno -al menos para mi- viene a eso de las 10.30 pm, pero como soy tan asustadiza, me da miedo ver pelís de terror...

Ayer platiqué casi toda la noche con Deviant, él desde el trabajo claro, y cuando se le vino la gente encima, se alejó un poco de la computadora, y yo esperaba haciendo otras cosas...Como ayer estuvo lluvioso, recordé ese día de enero del año 2005, cuando éramos apenas unos betabeles verdes y con moho queriendo florecer, siendo betabeles éramos felices, pero queríamos ser más felices, bueno, sin desviaciones, era un sábado 15 de enero del 2005, según ésto iríamos a un concierto de una amiga de Deviant, amiga que nunca ví en persona, y que al leerla por messenger me resultó pedante, sin embargo íbamos a ir, y fui a plancharme el pelo, pensamos de nuevo si ir o no, y bueno, llegadas las 10.30 pm, de ese día, fuimos al dichoso y mentado conciertazo tipo ''Nightwish''...

Nos fuimos caminando, hasta la parada del camión, el chofer nos miró y luego...Siguió su camino, iban pocas personas, siendo en la noche y siendo invierno, casi nadie está en la calle, yo iba con mis pantalones tipo cuero, con mi chamarra de piel y mis botas, pero al llegar no nos dio mucho etusiasmo y como estábamos como a 4 grados bajo cero, mejor nos fuímos a casa en un taxi.

No sé por que siempre que recuerdo eso, siento mariposas en la panza, no sé por que siempre me gusta ver la calle ''Morelos'' de noche, no sé por qué me gusta caminar por ahí. Hoy ha sido un día como todos, entre que se nubla y no, entre que llueve y chispea, pero ha sido otro día y otro día vivido, mañana es el día menos favorito para mis recuerdos, pero pasará...

Cuando Deviant y yo éramos betabeles verdes, hacíamos cosas de betabeles, como quedarnos en la cama todo el día y ver tele, ver películas, ver a bob esponja y comer el cereal de bob esponja, nos dormíamos cuando queríamos y juntos hacíamos de comer, y a veces salíamos por ahí.

Alguien me regaló para mi cumpleaños N° 19 un cojín en forma de perrita, de color café claro y brillante, ese cojín me ha acompañado desde hace casi un lustro, me lo llevé a México, lo hemos lavado, se ha descosido, se ha ''desesponjado'' pero la forma sigue ahí, hasta nombre le puse y se llama ''wendy'' en la parte de arriba tiene la cabeza y en las orejas dos moños rojos que siempre le he querido cambiar por unos morados, tiene una pequeña cola de la misma tela, y 4 pequeños pompones que emulan las 4 patas, ahora el cojín ya está viejo y como digo, tiene un pequeñísimo aujero en la parte del centro, lo lavo a mano, no quiero meterlo a la lavadora y que se rompa totalmente...

Deviant y yo jugábamos a qué ese cojín era nuestra hija, y le hemos tomado cariño al cojín !SI SE OYÉ ESTÚPIDO LEER QUE ALGUIEN LE TENGA CARIÑO A UN COJÍN! Pero es muy cierto, le tenemos cariño a ese cojín en forma de perrita.

Ahora el clóset es como una mini recámara...Donde quedan residuos de esos tiempos que también han pasado, queda el colchón infable donde dormíamos al incio de todo ésto, la caja que servía de mesa ya está en la basura junto con muchas ''chunches'' que hemos tirado...¿Pero a quién le importa? Si son cosas, a las que sólo nosotros, les damos valor.