Que diferente.

Por las mañanas ésta casa es un dulce ring de peleas, peleas para meternos a bañar, para despertar, para luchar contra una gorda que no quiere entender que no debe tirar el chupón debajo de la cuna, peleas mientras una niña de cabellos rojos, decide no enjuagarse, mientras brinca y pisa mis pies en la regadera, peleas por que se hace tarde y risas entre esas peleas contra el tiempo, peleas para peinarla, mientras la gordita observa calladita y atenta a su hermana luchar con el cepillo.

Mientras nos sentimos triunfadores de salir a las 8.45 de casa y caminar durante 5 minutos más, entrar al kinder y caminar por las canchas de futbol, hasta subir tres escalones y dejar al cielo en su salón de clases, la maestra nos saluda y le decimos adiós con la mano y lanzamos un te amo que viaja por las sillas y se le queda grabado en su corazoncito.

A medio día vamos por ella, con el calor que se resiste a bajar, con la banqueta terregosa y los ruidos de los coches que pasan a veces violentamente, otra vez el mismo recorrido, sólo que esperamos en la banqueta de enfrente junto con otros papás a que abran la puerta, pasamos por las mismas canchas, hasta llegar a un salón donde un montón de niños está gritando, jugando y alborotándose por que quieren regresar a casa.

Y cuando ella nos ve, se levanta de la sillita, y me toma de la mano, nos despedimos de la maestra, al llegar a la casa, todo se convierte en dulces e infantiles peleas, por buscar la sal y empezar a hacer la comida, por buscar una cuchara, por barrer y trapear, tomamos un descanso y viene la hora del trabajo de papá...Y entonces cuando él se va, la casa se queda quietecita y dormida, la cocina que es su terreno de juego, luce en paz y usada, con los sartenes por aquí y por acá, revueltos, oliendo a casa y oliendo a familia.

Ya han quedado atrás esas horas, y ahora me toca a mi darle un poco de vida a su terreno, más tarde cuando el hambre toque mis tripas y las haga un corazón...Que diferente es mi vida ahora, como cambió tan rápido en un lustro...Que diferentes son las cosas hoy.